Lizzie es una adolescente temperamental, en es obligada a pasar unos días con su abuela debido a un incidente en el colegio.
Sus padres confían que el ambiente tranquilo y apacible del rancho será beneficioso para la dificultosa joven. Lentamente Lizzie se relaja en su nueva rutina y emplea su energía en conocer y ayudar al caballo del rancho, al que nombra Hope.
De forma accidental, Lizzie descubre que la abuela está por perderlo todo debido a dificultades financieras. Es entonces que la enérgica e ingeniosa joven traza un plan para salvar el rancho y en el proceso, salvar también a Hope.